Reducción de la jornada laboral en Uruguay: señales del Ejecutivo que las empresas necesitan saber

Reducción de la jornada laboral en Uruguay: señales del Ejecutivo que las empresas necesitan saber

La reducción de la jornada laboral está en el centro del debate en América Latina y Uruguay no es la excepción. ¿Cómo impactará en la productividad? ¿Qué rol están jugando los Consejos de Salarios? ¿Y cuáles son las señales que envía el nuevo gobierno sobre este tema que inquieta tanto a los empresarios como a los trabajadores?

Reducción de la jornada laboral en Uruguay: señales del Ejecutivo que las empresas necesitan saber

Una tendencia regional que gana fuerza

 

En los últimos años, países como Chile, México, Colombia y Ecuador han aprobado o debatido leyes para disminuir las horas semanales de trabajo. La tendencia responde a cambios globales en la organización del empleo, al avance tecnológico y a demandas sindicales que buscan mejorar el balance entre vida personal y profesional.

 

Entre los beneficios señalados, se destacan mejoras en la calidad de vida y avances en la equidad de género, permitiendo a mujeres y hombres equiparar más su vida familiar con la laboral. Pero los riesgos no son menores: la productividad y la conciliación con los salarios son el talón de Aquiles de esta discusión, especialmente en sectores industriales y en actividades con procesos que no pueden simplificarse sin comprometer la calidad.

 

 

El debate en Uruguay: nuevas autoridades, nueva agenda

 

Con el cambio de gobierno en marzo de 2025 y la llegada de nuevas autoridades en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), el tema recobra fuerza en la agenda pública. Coincide además con el inicio de la 11ª Ronda de Consejos de Salarios, donde la reducción de la jornada figura entre las reivindicaciones sindicales, siguiendo la línea marcada por el PIT-CNT.

 

En ese contexto la Directora Nacional de Trabajo – Marcela Barrios explicó días atrás en un evento empresarial la posición del Poder Ejecutivo: el tema se encuentra en análisis dentro de una comisión en la órbita del Consejo Superior Tripartito (órgano de coordinación y gobernanza que entre sus funciones tiene la de estudiar y adoptar iniciativas en temas que considere pertinentes para el desarrollo de las relaciones laborales), integrada por delegados del Poder Ejecutivo, delegados de las organizaciones más representativas de empleadores y delegados de las organizaciones más representativas de trabajadores.

 

Este espacio cuenta con equipos técnicos que están analizando el impacto potencial sobre la productividad, buscando un modelo que se adapte a la realidad uruguaya, a su sistema de relaciones laborales y a los mecanismos de negociación colectiva. No existe un proyecto de ley inmediato: se apunta a consolidar insumos técnicos como primer paso.

 

En cuanto a las vías para avanzar, Barrios identificó dos alternativas principales:

 

1. Proyecto de ley consensuado entre empleadores y trabajadores, que el MTSS podría elevar al Parlamento.

2. Acuerdo marco general que sirva de referencia para que cada sector productivo lo adapte a su realidad en las mesas de negociación. Esto permitiría, por ejemplo, que en algunos sectores la reducción se concrete eliminando la jornada de los sábados, mientras que en otros implique acortar el horario diario. Sectores como el industrial, con procesos productivos continuos, requerirían soluciones distintas a las del comercio o los servicios. Una regulación uniforme podría no ser la mejor opción.

 

El objetivo, remarcó, es construir un marco de referencia que “baje” a la negociación sectorial. Por esta razón, el tema no fue incluido en los lineamientos del gobierno para la actual Ronda de Consejos de Salarios, por lo que es esperable que pueda incorporarse en la próxima.

 

Asimismo, desde el MTSS se ha destacado que:

- Las normas que regulan la jornada laboral en Uruguay datan de principios del siglo XX y requieren una revisión a la luz de los cambios actuales.

- No se espera que una reducción de horas genere automáticamente más empleo, como la experiencia internacional ya ha demostrado.

- El foco está en reorganizar el trabajo, optimizar procesos e incorporar tecnología para sostener la productividad.

- La reducción podría aplicarse de forma semanal, quincenal o anual, incluyendo, por ejemplo, más días de descanso, feriados o licencias.

 

Con esta definición, el Ejecutivo marcó que el tema no forma parte de los lineamientos de la actual Ronda de Consejos de Salarios, pero que seguramente sea materia de discusión en la próxima.  

 

 

Negociación colectiva y plataformas sindicales.

 

En paralelo, avanza una nueva ronda de Consejos de Salarios, el espacio de negociación tripartita donde sindicatos, cámaras empresariales y gobierno definen los convenios colectivos por rama de actividad. En este marco, y en línea con lo expresado por la Directora Nacional de Trabajo, si bien los sindicatos han incluido la reducción de la jornada laboral entre sus demandas, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social ha señalado que el tema está siendo abordado en una comisión específica. Esto, si bien no impide que las partes negocien al respecto a nivel sectorial, orienta a que la discusión principal se postergue para la próxima Ronda.

 

 

Los desafíos para las empresas: una mirada desde la realidad empresarial

 

Si bien la reducción de la jornada laboral suena atractiva, en algunos sectores resulta inviable en los hechos. En sectores con procesos continuos, alta estacionalidad o fuerte dependencia de mano de obra, reducir horas puede traducirse en mayores costos o pérdida de competitividad.

 

La reorganización de tareas y la incorporación de tecnologías que permitan mantener la productividad con menos horas requieren inversiones y un tiempo razonable de adaptación, que no todas las empresas están en condiciones de afrontar inmediatamente. Por ello, es imprescindible abordar el tema con flexibilidad, buscando soluciones que se ajusten a las particularidades de cada sector y evitando imposiciones rígidas que puedan comprometer la competitividad.

 

El debate recién comienza: con un gobierno nuevo y una agenda sindical activa, la reducción de la jornada laboral será un tema central en los próximos años. Desde el asesoramiento empresarial, el desafío será anticiparse, participar activamente en la discusión, tener “un lugar en la mesa” y asegurar que cualquier cambio preserve la sustentabilidad y la competitividad de las empresas. La clave estará en construir soluciones adaptadas a cada realidad productiva, que permitan avanzar sin comprometer la viabilidad del negocio.

 

 

Montevideo, Setiembre 2025

Compartir:

Sobre la autora

ABOGADA - SOCIA

Dra. Mariana Casella

Doctora en Derecho y Ciencias Sociales, graduada en la Universidad de la República. Su práctica y formación profesional se encuentra focalizada en Derecho Laboral, contando con un posgrado en Derecho del Trabajo (Universidad de Montevideo). Desde su ingreso a la firma en 2013 "Castellán Legal | Fiscal | Contable" lidera el Departamento Laboral, siendo socia desde...

Leer más

Contáctanos

Complete el formulario con sus datos y le responderemos a la brevedad. ¡Gracias!

Suscripción al newsletter